El término Scrum aplicado al desarrollo de proyectos, surge en 1986 a partir del informe titulado The New New Product Development Game, en el cual los autores Hirotaka Takeuchi e Ikujiro Nonaka, analizan el desarrollo de productos tecnológicos, en grandes empresas como Hewlett-Packard, 3M, Epson, Honda y NEC, entre otras.
LAS RAÍCES DE SCRUM
En este estudio los autores determinaron que en los métodos holísticos de desarrollo que utilizaban las empresas, existían seis características que se repetían:
Inestabilidad incorporada.
Equipos de proyecto autoorganizados.
Fases de desarrollo superpuestas.
Multiaprendizaje.
Control sutil (autonomía).
Transferencia organizativa del aprendizaje.
Estas piezas, que encajaban como rompecabezas, permitían a las organizaciones crear nuevos productos a través de procesos rápidos y flexibles.
Pero requerían un nuevo enfoque, que les permitiera hacer frente a estas nuevas características de velocidad y flexibilidad. Ya que el enfoque secuencial o en cascada propuesto hasta el momento, en que se planteaba “una carrera de relevos”, donde el proyecto pasaba secuencialmente de una fase a otra y donde las funciones de los miembros del equipo se especializaron y se segmentaron, se encontraba en conflicto con las nuevas necesidades.
EL TÉRMINO SCRUM
Scrum (o melé) es un término nacido en mundo del rugby que describe la formación entre ambos equipos que tiene el objetivo de reiniciar el juego, después de una falta leve, donde la pelota pasa dentro de una formación de 8 jugadores, mientras estos se mueven como una unidad en el campo.
Los autores utilizaron esta analogía, para describir esta nueva forma de trabajo, donde a través de la interacción constante un equipo multidisciplinario, cuidadosamente seleccionado trabaja de manera autoorganizada de principio a fin.
Como lo describen Hirotaka Takeuchi e Ikujiro Nonaka, las 6 características que son comunes a este tipo de equipos, tomadas individualmente, no suponen un cambio en cuanto a flexibilidad, mientras que, aplicadas en conjunto, constituye una poderosa herramienta de desarrollo.
La inestabilidad incorporada.
La alta dirección iniciaba el proceso señalando un objetivo amplio y marcando solo las líneas estratégicas generales, sin especificar un producto determinado o un plan de trabajo preestablecido. Esto al contrario de lo que se puede creer, dotaba al equipo de un reto desafiante y estimulante.
Autonomía.
La participación de la organización se limita a la orientación, financiación y apoyo moral de los miembros del equipo, sin tomar parte en la creación de los productos.
Autotrascendencia.
Inicialmente trabajan con los objetivos establecidos por la organización, pero a medida que avanzan en los proyectos, los equipos comienzan a establecer sus propios objetivos y a alejarse cada vez más del estatus Quo.
Fertilización cruzada.
Equipos multidisciplinares, con patrones de pensamiento y comportamiento distinto, llevan a cabo cada proyecto, lo que fomenta el surgimiento de nuevas ideas y conceptos.
Transferencia del aprendizaje.
No solo la acumulación de conocimientos a través de niveles y funciones. Sino la transmisión de conocimiento fuera de los grupos a otros miembros de la organización.
Fases de desarrollo superpuestas.
El enfoque superpuesto demuestra mayor velocidad y flexibilidad, pero también un conjunto de méritos “soft”, relacionado con las personas, como el fomento de la responsabilidad compartida, el compromiso, la cooperación, fomento de la participación y amplificación del enfoque para la resolución de problemas.
LA TRANSFORMACIÓN AL "NUEVO SCRUM"
En resumen, este artículo representa el origen del término SCRUM, además de su desarrollo conceptual tanto en su aspecto metodológico, como filosófico.
Es este artículo se basaría Jeff Sutherland para desarrollar en 1993 el proceso de SCRUM que sería utilizado en el mundo de creación de Software.
Más tarde en colaboración con Ken Schwaber, Sutherland desarrolló Scrum como un proceso formal en 1995, para luego presentarlo colectivamente durante la conferencia de OOPSLA de ese año en Texas. A partir de allí los mismos creadores junto a muchos otros practicantes de scrum, han seguido refinando los conceptos de este framework, implementandolo en todo el mundo.
En los últimos años scrum ha seguido incrementando su popularidad, hasta llegar a ser el framework ágil, más utilizado en el desarrollo de productos, según el reporte anual del estado de la agilidad 2021.
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